
Flora de Adén es un catálogo botánico de las plantas encontradas en Adén y sus alrededores, en el extremo meridional de la península de Arabia. La obra apareció en tres publicaciones entre 1914 y 1916. A pesar de no haber visitado nunca la región, el padre Ethelbert Blatter agregó 250 plantas a la literatura de las especies de la región conocidas. Para ello contó con varios herbarios y relatos de viajes, comenzando con los de Henry Salt (1780-1827). Cada planta está presentada en detalle, con su descripción física, nombres en latín y locales, ubicación, temporada de crecimiento y otra información disponible. Las descripciones rara vez citan usos medicinales o culinarios, pero, curiosamente, incluyen coloridos comentarios sobre las circunstancias de ciertos hallazgos, por ejemplo el siguiente: «Marchesetti es el único botánico que halló esta especie en Adén, y la hemos incluido solo haciendo referencia a su hallazgo, aunque nos permitimos dudar de la existencia real de la Cl. droserifolia en Adén». Ethelbert Blatter (1877-1934) fue un sacerdote jesuita y botánico suizo pionero en la India. Dejó su tierra natal para estudiar en Alemania y los Países Bajos y, más tarde, continuó sus estudios teológicos en Inglaterra. En 1903, se trasladó a Bombay, India, para enseñar en el Saint Xavier College y dedicarse a la investigación y a la publicación de estudios de botánica. Trabajaría allí durante el resto de su vida. Si bien sus principales contribuciones fueron en la India británica, sus libros sobre las plantas de Adén y Arabia constituyeron también importantes contribuciones a la bibliografía sobre botánica. Flora de Adén comprende el volumen VII de los Registros del Servicio Botánico Nacional de India (Botanical Survey of India o BSI, por su sigla en inglés). El BSI fue fundado en 1890 con el objetivo de analizar el valor económico de las plantas de la India. El interés europeo en la flora de la India se remonta a los primeros días de exploración y expansión colonial. Desde el siglo XVI, portugueses, neerlandeses y británicos recolectaron y estudiaron las plantas nativas. A medida que se incrementaba la extensión de las tierras bajo el control de la Compañía Británica de las Indias Orientales, también se expandía el estudio de la vida vegetal en el norte y en el noroeste del subcontinente indio. La expansión económica e imperial amplió los estudios más allá de las fronteras de la India británica, hasta Myanmar (Birmania) y la península de Arabia.