
Louis Nicolas (en actividad entre 1667 y 1675) era un jesuita francés que, en 1664, fue enviado como misionero a Canadá. Permaneció allí hasta 1675. Viajó mucho y desarrolló un gran interés por los pueblos, los idiomas, la flora y la fauna de Nueva Francia. Escribió tres obras importantes. Ninguna de ellas se publicó durante su vida, pero existen en forma manuscrita: Histoire naturelle des Indes occidentales (Historia natural de las Indias Occidentales); el manuscrito pictórico conocido como Codex Canadensis y la obra que aquí se presenta, Grammaire algonquine ou des sauvages de l'Amérique septentrionale (Gramática algonquina, o sobre los nativos de América del Norte). Nicolas vivió un tiempo en la residencia de los jesuitas en Sillery (hoy en día, Quebec). En 1667, partió a su primera misión: viajó con el padre Claude Allouez hacia la región de los ottawa, cerca del lago Superior. Luego, pasó un año en las tierras iroquesas al sur del lago Ontario. Regresó a Sillery en 1671. Sus perfeccionados conocimientos del algonquino le permitieron escribir su gramática entre 1672 y 1674. El manuscrito de Nicolas tiene gran cantidad de marcas de revisión, especialmente, en las páginas iniciales. En ellas, esboza un gran plan para producir no solo una gramática algonquina, sino también un catecismo completo en el mismo idioma, así como una topografía del Nuevo Mundo que incluyera una historia natural de la vida vegetal y animal, y una obra sobre la política, las costumbres y la religión de los nativos. El manuscrito está firmado por «Messire Louis Nicolas Prêtre» (Louis Nicolas, sacerdote misionero) y está dedicado al delfín, el heredero del rey Luis XIV. Nicolas no tuvo mucho éxito como misionero. En 1675, regresó a Francia y, en diciembre de 1678, fue eximido de la orden jesuita. A pesar de ello, continuó siendo sacerdote. Nada se sabe acerca de su vida posterior, ni del año o el lugar de su muerte.