
Este manuscrito de circa 1350 es una de las copias más antiguas que existen de Les voyagesde Marco Polo (Los viajes de Marco Polo), el relato del mercader veneciano Marco Polo (circa 1254-1324) de sus aventuras en Asia Central y el Lejano Oriente durante la última parte del siglo XIII. Posiblemente se trate de uno de los cinco manuscritos referidos al viaje de Marco Polo que pertenecieron al rey Carlos V de Francia (quien reinó desde 1364 hasta 1380). Más tarde, formó parte de la biblioteca del coleccionista de libros francés Alexandre Petau, quien lo vendió a la reina Cristina de Suecia (1626-1689) en 1650. Con la compañía de su padre, Niccolò, y de su tío Maffeo (también escrito como Matteo), Marco Polo viajó por tierra a China entre 1271 y 1275. Pasó los 17 años posteriores como consejero de Kublai Kan (1215-1294), nieto de Gengis Kan y conquistador de China, al servicio de quien se convirtió en emisario en China, así como en el sur y el sudeste de Asia. Los tres venecianos regresaron a su ciudad natal por mar entre 1292 y 1295. Marco Polo pronto se vio envuelto en la guerra entre Venecia y Génova. Dispuso y comandó una galera en la Marina veneciana. Los genoveses lo tomaron prisionero en 1296. Según cuenta la tradición, mientras estaba en la cárcel le dictó las historias de sus viajes a un compañero de celda, Rustichello da Pisa, quien las escribió en francés antiguo. El relato de Marco Polo no fue solo un simple registro del viaje, sino una descripción del mundo: una mezcla de un informe de viaje, leyendas, rumores e información práctica. Por estos motivos, Les voyagesde Marco Polo a veces se denomina Divisament du monde (Descripción del mundo) o Livre des merveilles du monde (Libro de las maravillas del mundo). Para los europeos, la obra constituyó una importante introducción a la historia y la geografía de Asia Central y China. En el final del manuscrito de Estocolmo, se presenta un mapamundi, un mapa medieval, zonal y esquemático del mundo que puede haber sido agregado más tarde.