
El monumento al zar Alejandro I (1777-1825) se descubrió el 23 de octubre (11 de octubre del calendario juliano) de 1831 para conmemorar la visita de Alejandro a Taganrog, una aldea en el sur de Rusia situada en la costa norte del mar de Azov, y su muerte por enfermedad en el mismo lugar. La viuda del zar, Isabel Alekséievna, escogió el lugar para el monumento. La mayor parte del dinero para su construcción fue donada por la casa imperial de los Romanov; el resto fue recolectado por los vecinos de Taganrog. La figura en bronce del emperador está completamente cubierta con un manto que cubre el uniforme de general. En la mano izquierda, sostiene la empuñadura de su espada y, en la mano derecha, un pergamino que contiene un código de leyes del Imperio ruso. El águila a sus pies simboliza la victoria de Rusia bajo su liderazgo sobre Napoleón. El monumento fue destruido, y la escultura fundida, en la década de 1920. Para la celebración del tricentenario de Taganrog, se reconstruyó el monumento, que fue presentado oficialmente el 12 de septiembre de 1998, en el mismo lugar donde se había descubierto en 1831, la antigua plaza del banco (hoy plaza de Alejandro). Este dibujo en tinta es el diseño original del monumento que realizó el escultor Iván Petrovich Martos (1754-1835). El documento se conserva en el Archivo Histórico Estatal Ruso.