Este mapa de 1821 de la provincia de Ekaterinoslav pertenece a una obra mayor, Geograficheskii atlas Rossiiskoi imperii, tsarstva Pol'skogo i velikogo kniazhestva Finliandskogo (Atlas geográfico del Imperio ruso, del Reino de Polonia y del Gran Ducado de Finlandia), que contiene 60 mapas del Imperio ruso. El altas, compilado y grabado por el coronel V. P. Piadyshev, refleja el detalle del trazado de mapas de los cartógrafos militares rusos durante el primer cuarto del siglo XIX. Cada mapa muestra centros de población, hostales, estaciones de correos, caminos, fronteras distritales y provinciales, y aduanas. Las distancias se proporcionan en verstas, una unidad de medida rusa, ahora en desuso, que equivalía a 1,07 kilómetros. Las leyendas y los topónimos se ofrecen en ruso y en francés. El territorio representado en el mapa se encuentra en la parte oriental de la actual Ucrania. Durante siglos, la región de Ekaterinoslav estuvo efectivamente dividida entre Polonia-Lituania y los tártaros de Crimea; el río Dniéper funcionaba como frontera natural. Cuando el atamanato cosaco se formó en el siglo XVIII, la región se convirtió en el núcleo de la Sich de Zaporozhia (centro del territorio cosaco autónomo desde alrededor de la década de 1550 hasta 1775) y de una fuerte cultura cosaca. Los intereses polacos y lituanos continuaron gobernando los asuntos regionales hasta que Bogdán Jmelnitski buscó una alianza militar con Rusia mediante el Tratado de Pereyáslav de 1654, lo que llevó a la mayor integración de la zona dentro del Imperio ruso. Los cosacos ayudaron a los rusos a defenderse del control polaco de la región, que se convirtió en un baluarte contra los tártaros de Crimea y de la Turquía otomana. Catalina la Grande recibió partes clave de la región septentrional del mar Negro enn virtud del Tratado de Küçük Kaynarca (que también aparece como Kuchuk Kainarji, 1774) celebrado con los otomanos. La ciudad de Ekaterinoslav (actual Dnipropetrovsk) lleva ese nombre en honor a Catalina la Grande (literalmente, «gloria de Catalina»). Gregorio Potemkin, el favorito de Catalina, se convirtió en el gobernador general de la nueva región rusa, que se llamó «Novoróssiya».
Este mapa de 1821 de la provincia de Ekaterinoslav pertenece a una obra mayor, Geograficheskii atlas Rossiiskoi imperii, tsarstva Pol'skogo i velikogo kniazhestva Finliandskogo (Atlas geográfico del Imperio ruso, del Reino de Polonia y del Gran Ducado de Finlandia), que contiene 60 mapas del Imperio ruso. El altas, compilado y grabado por el coronel V. P. Piadyshev, refleja el detalle del trazado de mapas de los cartógrafos militares rusos durante el primer cuarto del siglo XIX. Cada mapa muestra centros de población, hostales, estaciones de correos, caminos, fronteras distritales y provinciales, y aduanas. Las distancias se proporcionan en verstas, una unidad de medida rusa, ahora en desuso, que equivalía a 1,07 kilómetros. Las leyendas y los topónimos se ofrecen en ruso y en francés. El territorio representado en el mapa se encuentra en la parte oriental de la actual Ucrania. Durante siglos, la región de Ekaterinoslav estuvo efectivamente dividida entre Polonia-Lituania y los tártaros de Crimea; el río Dniéper funcionaba como frontera natural. Cuando el atamanato cosaco se formó en el siglo XVIII, la región se convirtió en el núcleo de la Sich de Zaporozhia (centro del territorio cosaco autónomo desde alrededor de la década de 1550 hasta 1775) y de una fuerte cultura cosaca. Los intereses polacos y lituanos continuaron gobernando los asuntos regionales hasta que Bogdán Jmelnitski buscó una alianza militar con Rusia mediante el Tratado de Pereyáslav de 1654, lo que llevó a la mayor integración de la zona dentro del Imperio ruso. Los cosacos ayudaron a los rusos a defenderse del control polaco de la región, que se convirtió en un baluarte contra los tártaros de Crimea y de la Turquía otomana. Catalina la Grande recibió partes clave de la región septentrional del mar Negro enn virtud del Tratado de Küçük Kaynarca (que también aparece como Kuchuk Kainarji, 1774) celebrado con los otomanos. La ciudad de Ekaterinoslav (actual Dnipropetrovsk) lleva ese nombre en honor a Catalina la Grande (literalmente, «gloria de Catalina»). Gregorio Potemkin, el favorito de Catalina, se convirtió en el gobernador general de la nueva región rusa, que se llamó «Novoróssiya».