En preparación para la conferencia de paz que tendría lugar después de la Primera Guerra Mundial, en la primavera de 1917, el Ministerio de Relaciones Exteriores británico creó un departamento especial responsable de proporcionar información de base para los representantes británicos en la conferencia. Nueva Guinea Británica (Papúa) es el número 88 en una serie de más de 160 estudios realizados por el departamento, de los cuales la mayor parte fue publicada tras la conclusión de la Conferencia de Paz de París que tuvo lugar en 1919. El libro trata los temas de geografía física y política, historia política, así como condiciones sociales, políticas y económicas. En vísperas de la Primera Guerra Mundial, la soberanía sobre Nueva Guinea estaba compartida entre los neerlandeses, que controlaban la mitad occidental de la isla; los alemanes, que habían reclamado la mitad norte de la parte oriental de la isla, y los británicos, cuya colonia ocupaba el cuarto sudeste de la isla, a través del estrecho de Torres desde Australia. La sección sobre historia política relata cómo Australia, en particular los Gobiernos de Nueva Gales del Sur y Queensland, habían presionado al Gobierno británico, reacio, a establecer un protectorado sobre la totalidad o parte de la Nueva Guinea no neerlandesa, un paso que finalmente dieron en 1884, en gran parte en respuesta a la preocupación por los planes alemanes para la isla. El estudio calcula que la población de Nueva Guinea Británica se encontraba entre los 200 000 y los 350 000 habitantes; la población nativa, compuesta tanto por los pueblos papuanos como melanesios. Las industrias principales incluyen la minería aurífera y la agricultura de plantación, con la copra (cocos) y el caucho como los cultivos más importantes. En 1905, el Gobierno británico confirió a Australia la responsabilidad de la administración de Nueva Guinea Británica, y en la Primera Guerra Mundial las fuerzas australianas ocuparon Nueva Guinea Alemana. Posteriormente Australia gobernó toda la parte oriental de la isla conforme a mandatos de la Sociedad de Naciones y las Naciones Unidas, hasta que se le concedió la plena independencia al Estado de Papúa Nueva Guinea, en 1975. La antigua Nueva Guinea neerlandesa forma parte de Indonesia.
En preparación para la conferencia de paz que tendría lugar después de la Primera Guerra Mundial, en la primavera de 1917, el Ministerio de Relaciones Exteriores británico creó un departamento especial responsable de proporcionar información de base para los representantes británicos en la conferencia. Nueva Guinea Británica (Papúa) es el número 88 en una serie de más de 160 estudios realizados por el departamento, de los cuales la mayor parte fue publicada tras la conclusión de la Conferencia de Paz de París que tuvo lugar en 1919. El libro trata los temas de geografía física y política, historia política, así como condiciones sociales, políticas y económicas. En vísperas de la Primera Guerra Mundial, la soberanía sobre Nueva Guinea estaba compartida entre los neerlandeses, que controlaban la mitad occidental de la isla; los alemanes, que habían reclamado la mitad norte de la parte oriental de la isla, y los británicos, cuya colonia ocupaba el cuarto sudeste de la isla, a través del estrecho de Torres desde Australia. La sección sobre historia política relata cómo Australia, en particular los Gobiernos de Nueva Gales del Sur y Queensland, habían presionado al Gobierno británico, reacio, a establecer un protectorado sobre la totalidad o parte de la Nueva Guinea no neerlandesa, un paso que finalmente dieron en 1884, en gran parte en respuesta a la preocupación por los planes alemanes para la isla. El estudio calcula que la población de Nueva Guinea Británica se encontraba entre los 200 000 y los 350 000 habitantes; la población nativa, compuesta tanto por los pueblos papuanos como melanesios. Las industrias principales incluyen la minería aurífera y la agricultura de plantación, con la copra (cocos) y el caucho como los cultivos más importantes. En 1905, el Gobierno británico confirió a Australia la responsabilidad de la administración de Nueva Guinea Británica, y en la Primera Guerra Mundial las fuerzas australianas ocuparon Nueva Guinea Alemana. Posteriormente Australia gobernó toda la parte oriental de la isla conforme a mandatos de la Sociedad de Naciones y las Naciones Unidas, hasta que se le concedió la plena independencia al Estado de Papúa Nueva Guinea, en 1975. La antigua Nueva Guinea neerlandesa forma parte de Indonesia.